Cristos Declinado

Sujeta dos mancuernas y recuéstate boca arriba sobre un banco declinado. Coloca las mancuernas por arriba de tu pecho con las palmas de las manos viéndose entre si y tus codos ligeramente flexionados. Gira un poco tus hombros hacia adentro para que tus codos queden viendo hacia afuera. Baja las mancuernas hacia los lados hasta que sientas como se estiran tus pectorales (mantén tus codos semiflexionados). Regresa las mancuernas a la posición inicial mientras aprietas tu pecho. Las mancuernas no deben tocarse al llegar arriba. Repite el movimiento.