¿Inmune al Sobreentrenamiento?

Con la temporada de gripa y tos a la vuelta de la esquina, este es buen momento para revisar los peligros del sobreentrenamiento. Todos tenemos metas para nuestro cuerpo, unas más ambiciosas que otras, y mientras se entrena para alcanzar el siguiente nivel, lo cual es muy común en la mayoría de los atletas serios, el sobreentrenamiento puede fácilmente tumbarte a solo unos pasos de esta meta.

Mientras que el ejercicio moderado impulsa las funciones inmunes del cuerpo, un desequilibrio entre un entrenamiento fuerte e intenso y la recuperación, puede comprometer la habilidad de tu cuerpo para prevenir las infecciones, gripe u otras enfermedades de las vías respiratorias superiores.

Un estudio reciente  publicado en el Journal of Applied Physiology, declaró que la actividad física era más propensa a contrarrestar el impacto del sistema inmune cuando el ejercicio era prolongado y continuo (1 hora – 1 hora 1/2), desarrollada entre el 55% y el 75% del esfuerzo máximo, y sin haber consumido alimentos.

En conjunto con los parámetros físicos, se tomó nota de los aspectos nutricionales. Este estudio encontró y comprobó que no hay otro substituto, más que el comer bien. Es por eso que muchos atletas de fuerza beben licuados de proteína antes y después de entrenar.

Las microfracciones encontradas en la proteína de suero de leche aislada ayudan a remplazar los niveles de glutatión que pueden disminuir durante los entrenamientos intensos, y son conocidos por apoyar la salud del sistema inmune. Entonces, asegúrate de dar a tus músculos el suficiente tiempo de recuperación si es que deseas mantenerte fuerte durante toda la temporada.